Con el anuncio del líder estatal del PRD, José Antonio Vázquez, respecto a la conformación de un frente de oposición que podría ir en coalición a las elecciones del 2021, se deja en claro que lo anunciado hace unos meses por Alejandro Moreno, cuando dijo que el PRI buscaría aliarse con otras fuerzas políticas para derrotar a Morena en las urnas.
Nadie duda de la fuerza que los partidos de oposición pueden llegar a representar si son capaces de construir plataformas electorales que vayan más allá de la simple unión de siglas, pues es claro que el triunfo arrasador de Morena en el 2018, fue en mucho resultado del distanciamiento entre sus aspiraciones y los reclamos de la gente.
Llama la atención que una sola fotografía donde aparecen los líderes del PRD, PAN y PRI, calienta de tal forma los ánimos que hasta hay quienes se adelantan a poner nombre y apellidos para encabezar estás candidaturas de coalición. Ridículo resulta decir que Victoria Rincón pudiera resultar a abanderada de este frente, con el argumento de que pocas mujeres han ocupado el cargo de presidenta municipal por Tuxtla. ¿Acaso están ciegos para no ver cuántas mujeres con suficiente capacidad existen en la capital?
Suena apresurado y hasta mala leche, cuando es bien sabido que uno de las piezas claves para la conformación de este frente de partidos en Tuxtla ha sido Willy Ochoa, y no solo eso, ha operado esta iniciativa de forma tal, que hasta algunos diputados federales ha puesto el grito en el cielo tratando de frenar el liderazgo del tuxtleco, que se ha colocado en muchos lugares al frente de este tema alcanzando incluso mejores resultados que los propios líderes estatales.
Es bien sabido que Willy Ochoa no es de la buena gracia de los talibanes que ahora encabeza lidera Héctor Rovelo en sustitución de Julián Nazar. Y esto solo tiene una explicación: su liderazgo les incómoda y sus logros no se los debe a ningún grupo fáctico del PRI sino a su propio trabajo y disciplina.
Por ello, no nos extrañaría que los propios grupos del PRI que ahora despachan en el edificio de Santo Domingo, buscaran hacerlo a un lado aún a sabiendas que nadie más que Willy trae una fuerte aceptaciones entre los tuxtlecos y los sectores populares y empresariales. En el fondo le hacen un favor, pues a la gente le queda claro que no se trata de un candidato que representa la descomposición de los grupos políticos sino que camina en una ruta bien planteada y sin acuerdos bajo la mesa.
Si los líderes de los partidos de oposición desean llevar candidatos ganadores, deben comenzar por priorizar el interés de sus bases y no de los grupos de poder. En lo personal, no creo que José Antonio Vázquez y Carlos Palomeque pequen de ingenuidad y pretendan defender posiciones ridículas. Si algo han sabido ejercer es inteligencia. Por algo han estado donde están y seguro estoy desean seguirlo estando.