Plástico de economía circular, un plan piloto de función a gran escala

0
606

“Con la expectativa de que 8 millones de toneladas de plásticos alcancen el océano cada año, necesitamos repensar nuestra forma de producir, usar y reutilizar plásticos con urgencia”, publica en su portal la Fundación Ellen Macarthur, firmante junto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, del Compromiso Global de la Nueva Economía del Plástico.
De acuerdo a esta fundación, la iniciativa Nueva Economía del Plástico tiene como objetivo crear impulso hacia un sistema de plásticos que funcione. “Los plásticos son una parte fundamental de nuestro día a día, pero también uno de los ejemplos más emblemáticos de nuestra actual economía lineal: extraer-producir-desperdiciar.”

La economía circular, “es un ciclo de desarrollo continuo positivo”, que preserva y aumenta el capital natural, optimiza los rendimientos de los recursos y minimiza los riesgos del sistema; reduce insumos como recursos naturales, comparte energía como recursos reciclables, reduce emisiones, disminuye pérdidas materiales como de residuos, manteniendo el valor de productos, componentes y materiales en la economía, así lo esquematiza Emilio Cerda Tena, del Departamento de Fundamentos del Análisis Económico, de la Universidad Complutense de Madrid.
Un reporte del Informe de progreso 2019 del Compromiso Global de la Nueva Economía del Plástico señala, que personas de todo el mundo se están uniendo para exigir un cambio en la forma en que fabricamos y usamos los plásticos.

Es un sistema, “que normalmente suena raro en cualquier parte de México, del país, especialmente aquí en San Cristóbal”, señala el Señor Orlando Villanueva Torres, comercializador del plástico en San Cristóbal de las Casas; significa, “reusar los plásticos que normalmente se desechan”, dijo al ser entrevistado.
“Nosotros le llamamos plástico de economía circular, a aquel plástico que por su consistencia se puede volver a rehusar sin tener que modificar su concepto básico y esto genera utilidades en tres etapas”, mencionó Villanueva Torres; porque, “llega como primer producto al fabricante, posteriormente al consumidor y una vez que este fue desechado se recolecta y se vuelve a ocupar. La ventaja, añade, “que aquí hay una remuneración para el que lo recolecta y otra vez para el que lo vuelve a usar y también para el consumidor porque se reducen los costos de fabricación y el uso sigue funcionando con la misma calidad y el mismo concepto originalmente”.
Don Orlando Villanueva explica, cómo inició esta Nueva Economía del Plástico hace unos 5 años en San Cristóbal de las Casas, una vez que lo analizaron y empezaron a darse cuenta que podían generar utilidades; “nosotros lo comenzamos a comprar, ahí ya obtiene una utilidad el que lo recolecta, se lava, se esteriliza y se vuelve otra vez a ocupar en el producto con el que se vende al consumidor”.
A partir de entonces tienen funcionando ese sistema, relata; y que hasta la fecha, “lo estamos manejando como un plan piloto pero que puede funcionar a gran escala en otros niveles, hablando en términos generales del plástico en sí y eso es lo que actualmente hacemos nosotros aquí en la zona de San Cristóbal y sus alrededores”, puntualizó.
La economía circular del plástico, parece ser una buena alternativa, ante los millones de peces con estómagos llenos de partículas de plástico, focas ahorcadas con plástico, tortugas atrapadas en redes de plástico, garzas embolsadas y en general toda la flora marina, que se encuentra mortalmente amenazada ante el terrible uso indiscriminado del plástico; sin hacer a un lado, el grave daño que éste ocasiona en la corteza terrestre y a los seres humanos de todas partes del planeta.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí