Debido a la falta de dirección del Partido Revolucionario Institucional (PRI), militantes decidieron retirarse, reconociendo que su partido ha muerto y que no podrá levantarse, por eso es mejor renunciar con dignidad para no seguir en las mismas condiciones.
Lupita Andrade y Rita Emilia Salazar Ballinas decidieron caminar por otros espacios al servicio de la sociedad y de otros partidos políticos, donde buscan encontrar el espacio para así consolidar proyectos que van en beneficio de todos los chiapanecos.
En el caso de Lupita Andrade, fue la abogada que defendió por años al partido para poder lograr obtener presidencias municipales, diputaciones locales y federales ante el TRIFE, así como otros que fueron en el sentido del PRI, se consolidó en su momento acciones jurídicas en varios sentidos.
Rita Salazar se formó en los cuadros con la creación de grupos no solo de mujeres si no en colonias y logrando que el PRI se fortaleciera con simpatizantes y militantes en Tuxtla Gutiérrez, como en el resto de la entidad, donde aún se le recuerda con movimientos partidistas.
Algunos priistas dijeron que es lamentable para su Partido la renuncia de dos extraordinarios cuadros femeninos quienes ahora militan como cuadros destacados en otro Instituto Político, «se sigue desmoronando nuestro Partido en manos de Rubén Zuarth Esquinca y Alejandro Moreno Cárdenas ante la continua salida de Militantes que ya no ven como opción al PRI mientras sigan al frente esta banda de Piratas».
Ellos con las diputaciones plurinominales agandalladas para su banda y familias siguen tratando de engañar con discurso de «buenos resultados» cuando han sido los más trágicos en nuestra historia como Instituto Político, sentenciaron los militantes que piden cambios urgentes.
