¿Quién es quién?
La opinión pública internacional considera que López Obrador no duda en cargar contra los que considera sus adversarios. Algo que no es muy bueno para nuestro país y que deja mal parado el supuesto triunfo de la democracia encabezado por el propio mandatario.
Y es ayer lunes, trascendió que el presidente dio un paso más en su defensa de la reforma eléctrica que cruza la frontera de la interferencia en las decisiones judiciales, al enviar una carta al ministro de la Suprema Corte y del Consejo de la Judicatura, Arturo Zaldívar, para solicitar formalmente una investigación del juez que la semana pasada suspendió temporalmente la aplicación de la nueva ley que regula la distribución de electricidad. La decisión de Juan Pablo Gómez Fierro, titular del Juzgado Segundo de Distrito en materia Administrativa, se dio horas después de que la reforma entrara en vigor al admitir el recurso de un parque fotovoltaico. López Obrador quiere demostrar que no está dispuesto a ceder en un asunto que considera político antes que jurídico y decidió retar al Poder Judicial.
El presidente leyó el escrito remitido a Zaldívar durante su conferencia de prensa matutina. “De manera respetuosa y en observancia al principio de separación de poderes, le solicito que el Consejo que usted preside determine e informe si a la autoridad judicial mencionada le correspondía o no aplicar de manera oficiosa a quienes no lo solicitaron y si es de su competencia o no resolver sobre este caso”, reza la carta, que va más allá y reclama una indagación de la actuación del juez. “Asimismo, y si mi petición es legalmente procedente, solicito que el Consejo de la Judicatura lleve a cabo una investigación para esclarecer la actuación del juez Gómez Fierro en este episodio”, continúa.
Zaldívar contestó horas después a través de una comunicación que también hizo pública. Su respuesta es institucional: toma nota de la petición e informa de que la remitirá al área correspondiente del Consejo de la Judicatura. De existir elementos para ello, agrega, el órgano abrirá una investigación. Al mismo tiempo, el presidente de la Corte reivindica la independencia de la justicia y hace de su mensaje un aviso en sí mismo. “Como usted sabe, es presupuesto de la democracia y del Estado de derecho que juezas y jueces puedan actuar en un marco de autonomía. […] Seguiremos cumpliendo con esta encomienda”. Zaldívar ya se había pronunciado sobre el caso este fin de semana. Sus palabras, difundidas en las redes sociales, sonaban a respuesta anticipada y dejaban clara su oposición a las intromisiones del poder político. “Las y los jueces federales actúan con independencia y autonomía. El Consejo de la Judicatura Federal garantiza que puedan ejercer su función con absoluta libertad. Sus fallos pueden ser recurridos, pero siempre respetados bajo la óptica de la independencia judicial”, afirmó.
Podría ser que López Obrador esté haciendo de la reforma eléctrica una apuesta personal y todo parte de una batalla política. Es político el fortalecimiento de una empresa del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), frente a la iniciativa privada, el fondo de la nueva ley. Y es una trinchera política también su defensa.
El mismo López Obrador lo reconoció durante su comparecencia. “No es solo lo jurídico, es lo político”, ha dicho. Y ha agregado que “antes estos asuntos no trascendían”, porque que los gobernantes siempre interfirieron en los tribunales. Hoy podría ser lo mismo, pero refritiado.